El método Guillour para aumentar la concentración en niños se basa en la realización de ejercicio estructurados a través de líneas y trazos. Su ejecución permite el desarrollo de la inteligencia espacial y la coordinación óculo-manual.
Existen niños que realizan sus labores rápidamente, en tiempo corto, sin levantar la vista del cuaderno. Sin embargo, otros son más lentos y tardan más, porque cualquier cosa les llama potentemente la atención y se desconcentran fácilmente. Para todos ellos, este sistema es más que interesante. Se llama método Guillour para aumentar la concentración en los niños y se basa en la observación por medio de un espejo.
Se trata de ejercicios estructurados por medio de líneas y trazos. En ocasiones el ejercicio le pedirá copiar un dibujo en la misma dirección que se observa, y en otras que lo copie en la forma inversa. O bien buscar la salida de un laberinto pero sin dejar de mirar al espejo. Sigue leyendo y te contamos todo acerca de él.
El método Guillour se basa en la realización de ejercicios estructurados a través de líneas y trazos donde los niños copian o repasan mirando la imagen en un espejo. Es decir, los niños deben trabajar la simetría y la inteligencia espacial. Esto, además, les obliga a concentrarse y puntualizar en los pequeños detalles de la imagen. El niño debe reproducir así la figura o la serie de figuras reflejadas en el espejo, buscar figuras escondidas o trazar caminos.
Cuando logramos la concentración en algo, la atención se enfoca en un tema explícito. En este proceso interviene el trabajo de los dos hemisferios cerebrales. Así, el hemisferio izquierdo es el responsable de las funciones lógicas, analíticas y la parte verbal. Por otra parte, el hemisferio derecho controla la parte no verbal, espacial y analógica.
Los ejercicios están estructurados y sirven para elevar la concentración y promover el funcionamiento y la conexión entre ambos hemisferios. Esto contribuye a bajar los niveles de ansiedad. Además, la estimulación psicomotriz se consigue al alternar las funciones de su brazo para poder realizar el ejercicio.
Además, la concentración en los niños se puede ejercitar por medio de otras herramientas:
Este método favorece especialmente a niños con TDAH (Trastorno del déficit atencional con o sin hiperactividad) o a pacientes que han sufrido algún tipo de lesión cerebral. Sin embargo, el método es totalmente efectivo en personas que necesiten aumentar la concentración en general y se puede aplicar tanto a personas adultas como a niños.
Por otra parte, es un ejercicio que se recomienda realizar de manera lenta. Es decir, el niño debe ir plasmando el dibujo reflejado en el espejo y luego repasar las líneas con el dedo de manera pausada. Cuando el niño recorre las líneas con el dedo focaliza mejor lo que está haciendo.
“Siempre es recomendable comenzar con este método desde el momento en el cual se detecta una dificultad de aprendizaje, puesto que cuanto antes se estimule esta, los resultados serán más rápidos”
El ejercicio más conocido dentro del Método Guillour consiste en ubicar una lámina sobre una mesa y colocar un espejo enfrente para observar su reflejo. Por supuesto, no se debe mirar directamente a la hoja o cuaderno, sino que se tiene que mantener la mirada en el espejo.